Por Fary Mussa
En el mundo y en México existen graves problemas de salud y nutrición que afectan a millones de niños. En primera, tenemos la desnutrición ocasionada por una alimentación deficiente, y su contraparte el sobrepeso y obesidad, por una alimentación excesiva. Aun si el niño presenta un peso adecuado se puede tener alguna deficiencia de nutrimentos, por lo que debemos trabajar en la promoción de una alimentación saludable.
A pesar de los enormes avances que ha tenido México en los últimos años, la desnutrición y la obesidad siguen siendo un problema a solucionar en el país; debido a que aún el 7.25% en zonas urbanas presenta desnutrición, duplicándose la cifra en zonas Rurales; y si hablamos de obesidad esta cifra asciende a un 26%, llevando a México a ocupar el primer lugar mundial en obesidad infantil (UNICEF México).
Las promociones de hábitos saludables consolidan las bases de una correcta alimentación y actividad física, contribuyendo a que los niños tengan un crecimiento y desarrollo saludable que perdure a lo largo de su vida.
4 hábitos súper importantes y básicos que funcionan para cualquiera:
- Alimentación de acuerdo a edad
- Mide las porciones
- Elige alimentos nutritivos
- Actívalos diariamente
Alimentación de acuerdo a su edad
La Organización Mundial para la Salud (OMS) y el Fondo para la Infancia de las Naciones Unidas (UNICEF) recomiendan que durante los primeros seis meses de vida los niños sean alimentados en el seno materno exclusivamente. A partir de los seis meses comenzar a introducir alimentos complementarios a la dieta del bebé y seguir proporcionando leche materna hasta los 2 años de edad. Esto debido a que el cuerpo del bebé está en desarrollo desde que es concebido y con la leche materna le damos tiempo para adaptarse y desarrollar funciones. Con la leche materna cubrimos las necesidades de energía y nutrimentos durante los primeros seis meses, pero conforme el niño va creciendo requiere alimentos adicionales y con estos cubrir sus necesidades alcanzando su desarrollo óptimo.
Mide las Porciones
Aquí lo primero es saber, ¿qué es una porción?
Una porción es la cantidad de alimento que una persona consume.
Estudios científicos han revelado que los niños preescolares que sirven sus alimentos en platos grandes consumen porciones más grandes.
Servir porciones más grandes puede aumentar el consumo de energía entre 60 y 120 kcal en cada tiempo de comida (DiSantis K.I et al., 2013)
Sabemos que es complicado saber cuánto le debo servir para tener una ingestión adecuada, es por ello que debemos estar bien informados de la cantidad aproximada que nuestros niños deben consumir, también enseñarlos a identificar las sensaciones de hambre-saciedad y evitar obligarlos a comer más.
Elegir alimentos nutritivos
Para una dieta correcta, se deben consumir todos los grupos de alimentos: frutas y verduras, cereales y leguminosas, alimentos de origen animal. De cada alimento obtenemos nutrimentos (carbohidratos, proteínas, grasas, vitaminas y minerales).
Solamente 3 de cada 10 niños en edad escolar consumen frutas y verduras diariamente (Arvizu MO y col, 2015.)
Lo primero que debemos hacer es cocinar en casa. Tener siempre disponibles frutas y verduras lavadas y desinfectadas a su alcance. Tener una alimentación variada y suficiente y consumir alimentos sin agregar azúcar y sal; todo esto promueve la salud, ayuda al control de peso y previene enfermedades crónicas.
Actívalos diariamente
Entendamos que actividad física es todo movimiento del cuerpo en donde se involucra esqueleto y músculos, esta genera un gasto de energía y por consecuencia ayuda a controlar el peso. Esta actividad va desde caminar, subir y bajar escaleras, jugar.
Actualmente en México solamente 4 de cada 10 niños escolares realizan actividad física y 7 de cada 10 pasa más de dos horas al día frente a algún monitor (televisión, computadora, tabletas) (ENSANUT, 2012).
Artículo tomado de nuestra edición impresa.