Por Paloma Castillo Silva
Los padres investigan, preguntan, leen, se informan y terminan por convencerse, o no, de si la educación no escolarizada es una opción factible, adecuada o simplemente posible para su familia.
Bueno, pues ahora les presento los 5 mitos más comunes en torno a la educación en casa, algunos de ellos surgen de nosotros los padres, pero otros son comentarios que nos hace la gente al escuchar que nuestros hijos no asisten a la escuela:
- Es ilegal
Por supuesto que es legal. No existe hasta ahora, ninguna ley que prohíba a los padres desescolarizar a sus hijos. El artículo tercero constitucional menciona explícitamente que todo individuo, tiene derecho a recibir educación, por lo tanto, al recibir educación en casa, los padres estamos haciendo cumplir dicha ley.
Si bien es cierto, en otros países está prohibido, en cambio en otros como Alaska y E.U.A, es totalmente aceptado, existen opciones y planes de estudio que el mismo gobierno ha aprobado e incluso promueve.
En México, a pesar de que ha incrementado el número de familias que educan en casa, esta alternativa sigue siendo poco común, debido a esto, no existe un apoyo académico (planes, programas, certificaciones para padres, herramientas de trabajo y capacitación) por parte del gobierno, sin embargo, las familias pueden validar los estudios de primaria y secundaria de sus hijos a través del Instituto Nacional de Educación para Adultos.
Por otro lado, existe la opción de validar los estudios a través de escuelas extranjeras, sobre todo en E.U.A, opción que ha sido de gran apoyo para muchas familias para facilitar su trámite de validación y recibir una evaluación adecuada a la educación que sus hijos reciben.
- Es necesario ser maestro
Generalmente, cuando los papás me preguntan esto yo respondo: “No existe nadie sobre la faz de la tierra a quien le importe más la educación de tus hijos que a ustedes como padres”, a ningún maestro, director, compañero, tío, abuelo ni amigo le importa más que a ti el aprendizaje de tus hijos. Por esa razón, lo harás excelente, porque educar en casa te permite conocer los procesos de aprendizaje de tu hijo a conciencia, porque observarás, porque serás un espectador y alentador en todo momento, porque darás tu máximo esfuerzo, porque no te pagan por jornada, porque no es un empleo, es una forma de vida.
- Tus hijos viven en una burbuja y eso afecta su socialización
Este ha sido el comentario que nunca le falta a las familias homeschoolers y considero que algunas personas (en ocasiones me incluyo) tenemos mal entendido dicho concepto creyendo que la socialización se reduce a un grupo numeroso de niños juntos haciendo actividades similares de forma continua, se le da más importancia a la cantidad de niños que a la clase de relaciones que establecen. Para nosotros el concepto de socializar ha mutado desde hace años, socializar no significa estar con muchos niños, mucho tiempo, significa que seas capaz de comunicarte con cualquier persona, no solo con niños de tu edad sino con más pequeños, más grandes, con adultos, ancianos, con gente que no pertenece a tu familia, etc. Es cierto que como familia somos personas más selectivas al entrañar amistades, pero más abiertas al aceptar la convivencia diaria con todo tipo de personas (de todas edades, sexo, gustos, nivel económico, cultural, religioso, etc.)
Los niños homeschoolers son niños sociables, son niños que al contrario de estar en una “burbuja” salen, se trasladan por su comunidad, exploran su entorno, conocen el mundo y al estar respaldados todo el tiempo por su familia y sintiéndose protegidos en casa, les da seguridad desprenderse para conocer amigos nuevos.
Sin embargo, debemos observar que hay niños más tímidos que otros, tanto en las escuelas como en las casas, y esto está más ligado al temperamento y al carácter de cada niño, de sus experiencias vividas y su personalidad.
- Es solo para quienes pertenecen a alguna comunidad en específico
En ocasiones he escuchado comentarios como: “son hippies”, “es solo para personas cristianas” “es necesario ser vegano”, etc…
De ninguna manera, la educación en casa, en ninguna de sus “modalidades” es exclusiva de ciertos grupos o comunidades. Cualquier persona, puede decidirse por esta alternativa, incluso si come carne, no cree en Dios o tiene un estilo de vida totalmente tradicional.
Lo que sí es verdad, es que la educación en casa, al igual que las escuelas, se puede llevar a cabo de diferentes maneras, el estilo de vida y de crianza determinará el tipo de educación que ofrecemos a nuestros chicos, y es ahí donde puedes comulgar más con ciertas familias y no tanto con otras.
Actualmente existen algunos grandes grupos o “ramas” de la educación en casa, yo conozco 3: homeschooling, unschooling y radicalschool. Y dentro de los mismos, existen familias diferentes, con estilos de vida totalmente diferente, con creencias diferentes.
- Educar en casa es costoso
Educar en casa, puede ser tan costoso o económico como tú lo decidas, todo dependerá de:
- Si compras el currículum inscribiéndote a alguna escuela extranjera
- Si viajas mucho
- Si tus hijos asisten a clases “extras” como inglés, música, ballet, etc.
Sin embargo, con poco presupuesto, puedes atender las necesidades de tus hijos, date la oportunidad de experimentar, de utilizar la creatividad, de sacarle provecho a los materiales que tienes en casa, apóyate de otras familias y el resultado te sorprenderá.
En muchos casos, la economía de la familia se ve un tanto afectada debido a que generalmente uno de los padres deja de trabajar para permanecer en casa. En la mayoría de los casos, es la madre la que abandona su trabajo para cuidar de sus hijos. Sin embargo, poco a poco, comienzan a surgir nuevas fuentes generadoras de dinero, muchas madres emprenden negocios desde casa, comienzan a trabajar por horas, e incluso hay padres que se turnan el cuidado de sus hijos y eso les permite trabajar a contra turno.
Si te interesa desescolarizar a tus hijos y hacerte cargo de su educación, infórmate, lee, pregunta y sal de dudas. Rompe con los mitos y leyendas urbanas que giran en torno a esta alternativa.