EL ARTE NOS SALVA es un proyecto que nace a raíz del sismo del 19 de septiembre. Afortunadamente pudimos apreciar que hubo un alto nivel de respuesta por parte de los mexicanos ante la emergencia y que se pudieron satisfacer rápidamente las necesidades básicas como lo eran cobijo, alimentación, abasto de medicinas y ayuda voluntaria. No obstante, faltaba aún una manera de hacerle frente a la situación, una manera de superar todo esto. Hubo muchas brigadas de psicólogos que trataban de dar terapia a las comunidades afectadas, pero eran tantas que no se daban abasto.
Como artistas visuales Andrea Badillo y Any Martínez buscaban una manera de incidir y mandar ayuda desde su profesión en el arte, por lo que reflexionando cayeron en cuenta de que el arte es un medio de catarsis ante situaciones difíciles, el arte es un medio de terapia y en efecto, el arte salva.
Llegando a esta conclusión se comenzó a formular el proyecto de un libro infantil para colorear abordando los temas relacionados al sismo, pero sobre todo con un mayor enfoque a las cosas positivas como la ayuda recibida, la solidaridad y la unión de los mexicanos. Se decidió buscar asesoría con amigos y familiares en el campo de la psicología para tener la certeza de que el mensaje fuera claro y altamente positivo. Ellos revisaron los bocetos y tras revisar las observaciones señaladas se continuó con el proyecto haciendo las imágenes digitales, el diseño editorial, y comenzó lo complicado; buscar patrocinios.
Debido a que el proyecto es únicamente de dos personas sin ningún tipo de apoyo institucional se necesitaba un gran patrocinio para poder realizarlo, afortunadamente muchos amigos y familiares de las artistas hicieron aportaciones económicas, mientras que los que de momento no podían donar contribuyeron compartiendo el proyecto en sus redes sociales y lugares de trabajo por lo que fue creciendo nuestro alcance. Además, llegó un gran patrocinio por parte de “La Panorámica Editorial” y la imprenta “El Magallarte” quienes se comprometieron a imprimir un tiraje de 2000 ejemplares para la primera edición, cobrando únicamente el material y regalando toda la mano de obra.
Gracias a los donativos de muchísimas personas se logró llegar a la meta de dos mil ejemplares impresos de los que se han repartido 600 hasta la fecha.
Andrea Badillo partió a la Ciudad de México a mediados de noviembre para hacer estudio de campo, mientras Any Martínez esperaba la entrega de los libros impresos. Dentro del estudio de campo se contactó con las autoridades del INBA quienes invitaron a Andrea a una brigada cultural con los niños afectados en el Rébsamen y apoyaron el proyecto imprimiendo ejemplares de los libritos para la ocasión. Posteriormente fue entregado el total de impresos por parte de La Panorámica más por cuestión de peso de equipaje únicamente se pudieron trasladar 600 libros a la Ciudad de México y aprovechando el asueto laboral de los inicios de noviembre, Any y Andrea comenzaron a trabajar y realizaron brigadas dentro y fuera de la Ciudad de México.
Lo primero que hicieron al tener los libros en la Ciudad de México fue salir a comprar cajas de colores que gracias a los donativos se pudieron comprar un aproximado de 300. Posteriormente armaron paquetes de libritos con colores y sacapuntas para repartir. Ya con los paquetes listos salieron a buscar albergues activos y en un albergue de Cafetales en Coyoacán les permitieron realizar una brigada.
Ese mismo día fueron contactadas por el “Centro de acopio popular Tetela del Volcán UAEM” conformado por jóvenes estudiantes de la Universidad Autónoma del Estado de Morelos quienes realizan brigadas culturales cada fin de semana con la comunidad de Tetela del Volcán en el estado de Morelos. Las artistas fueron invitadas a la brigada y todos quedaron maravillados con el proyecto. Al trabajar en Tetela del Volcán se pudo apreciar una muy buena respuesta por parte de los niños y los padres de familia que se acercaban con ellos, hubo incluso quienes pedían libros para llevar a sus hermanitos, a sus sobrinos o a sus nietos.
Debido a que esta comunidad fue gravemente afectada por el sismo, el grupo Topos Azteca aún realiza labores en el lugar. Ellos, al regresar de una jornada de trabajo se acercaron a ver el librito de EL ARTE NOS SALVA y hasta pidieron que se les obsequiara uno pues les había gustado mucho. Fue muy grande la sorpresa de las artistas al ver a los topos coloreando sus libritos a la hora de la cena, mientras otros realizaban un simulacro.
Al día siguiente las últimas actividades consistieron en repartir paquetes de libritos con colores y sacapuntas con contactos de confianza, unos los pidieron para una comunidad afectada en puebla, otros para Totolapan Morelos, y unos más para repartir con los pequeñitos del Rébsamen que no pudieron asistir a la primera brigada.
Actualmente se siguen solicitando donaciones económicas para seguir comprando cajas de colores y que los niños tengan con qué trabajar. Toda la información, los progresos y resultados son expuestos en la página de Facebook del proyecto “EL ARTE NOS SALVA”.