Lo que sea que estés viviendo, pasando como mujer o como madre, escríbelo y verás qué buen resultado.
La maternidad es una gran oportunidad de sacar un buen material de escritura. Las mamás atravesamos por muchísimos eventos conmovedores y desgarradores. Mucho más que pretender convertirte en Blogger o escritora profesional, escribir sobre las travesuras de nuestros niños puede ser realmente terapéutico.
Nuestros hijos pueden ser increíblemente dulces, alucinantemente brillantes, ridículamente divertidos y frustrantes. Tienen las mejores citas, pequeñas frases de las que aún me río en voz alta, años más tarde serán recuerdos que nos darán ánimos en los días difíciles.
En otras ocasiones, anotar tus sentimientos sobre una fase problemática en el desarrollo de la identidad de tu preadolescente te puede ayudar a procesar la confusión de emociones, a desenredar la situación actual entrelazada del bagaje emocional de las luchas de identidad de tu propia juventud.
En efecto, escribir puede ser una especie de “terapia de mamá”. El proceso de contar historias permite una mayor comprensión de nuestros mundos personales. En otras palabras, escribir sobre una experiencia desafiante trae una sensación de resolución, lo que permite que el cerebro diluya las emociones que rodean los recuerdos dolorosos. Los eventos dolorosos que no se permiten construir en una narrativa contribuyen a una repetida reexperimentación de esos eventos con la misma intensidad de emociones difíciles. La escritura dibuja y desenreda esas emociones para que los eventos dolorosos puedan ser más fácilmente entendidos por nuestro subconsciente. Además, escribir puede ser relajante no solo para el cerebro sino también para nuestros cuerpos. Algunos beneficios son:
• Mejora del bienestar psicológico,
• Disminuye la presión sanguínea,
• Mejora el sistema inmune,
• Mejor memoria de trabajo.
La clave es que escribir sea divertido. Para alguien con talento natural para escribir, esto puede ser fácil. Para otros, escribir puede ser desalentador.
Aquí están 5 ideas para que cualquiera comience a escribir por diversión:
1. Captura frases divertidas de tus hijos. Lleva contigo un block de notas pequeño, y siempre que escuches una cita, o algo que quieras capturar de otra forma que no sea en fotos, anótalo. Mantén las citas en un cuaderno para volver a leer más tarde y simplemente ¡reir!
2. Haz una lista de agradecimientos. Escribe tres cosas que agradeces al menos una vez al día. Puede ser cualquier cosa, pequeña o grande. Mantén las listas en un cuaderno para reflexionar. Esta es una forma muy fácil de causar más de una actitud de acción de gracias en tu vida.
3. Resalta tus momentos más tristes y alegres. Al final del día, anota un momento en que te sentiste enojada, otro cuando triste y otro cuando te sentiste contenta. Esto te ayudará a identificar y procesar tus emociones, especialmente cuando estás demasiado ocupada.
4. Anota tu objetivo y progreso diario. Al comienzo del día, escribe una meta diaria. Tal vez sea para sentirte más alegre, o para manejar mejor el enojo, o para tomar más tiempo para tí. Luego, al final del día, escribe tu progreso: ¿Hubo momentos en que estuviste alegre? ¿Tomaste medidas para controlar tus respuestas enojadas y rotundas? ¿Obtuviste unos minutos más de tiempo para tí? Algunos días, parecerá que no has avanzado hacia tu objetivo, quizá hasta vayas para atrás, así que asegúrate de encontrar siempre algo para automotivarte.
5. Escribe libremente lo que sea durante 15 minutos. Simplemente comienza a escribir, escribe cualquier cosa y todo lo que te venga a la mente, y escribe durante aproximadamente 15 minutos seguidos. No prestes atención a la puntuación, la ortografía, la gramática o si algo tiene sentido. Solo déjalo ir y escribe. Este tipo de escritura libre ayuda a superar el bloqueo mental que muchas escritoras principiantes tienen que “no saben cómo escribir” o que “no escriben bien”. Escribir, cuando se usa como una herramienta de equilibrio para las madres, no se trata de escribir profesionalmente; se trata simplemente de desencadenar pensamientos y emociones. Y recuerda que en No Estás Sola, siempre habrá un espacio para que compartas tus pensamientos, tus escritos.
