Para mí, ser madre y empresaria es tener un balance en la vida y sentirme completa. El ser madre es la satisfacción y el regalo más grande en mi vida, lo que más disfruto hacer, y esto llegó en una etapa perfecta para mí, cuando ya había dedicado mucho tiempo a participar con mi familia en los negocios, así es que pude dejar todo por un tiempo para estar en casa.
Desde los 16 años empecé mi vida laboral apoyando el negocio de transporte que iniciaba mi papá y unos años después comenzamos a construir salones de fiestas en diferentes zonas de la ciudad, esto mientras yo estudiaba la carrera en Monterrey y llegaba los fines de semana a Saltillo para encargarme del funcionamiento de los mismos, hasta que hoy en día ya completamos el 11vo salón que recién inauguramos el año pasado.
Gracias a Dios cuento con un papá-jefe que es comprensivo, y quien, al iniciar mi etapa como madre, me permitió, por decirlo de una forma, estar en casa dedicada a mi esposo y mis hijos de tiempo completo. Ahora que ya están en la escuela me he ido reincorporando poco a poco, aunque algunas veces corro demasiado.
Me encanta trabajar, siento que es sumamente importante para muchas mujeres hacerlo, ya que ayuda a ser independiente, te mantiene actualizada y sobre todo activa. No importa el tamaño del que sea el negocio, el tipo de trabajo o si haces algo en beneficio de alguna causa o asociación. Me impresiona ver en la ciudad la cantidad de mamás y familias que hacen o venden cosas, las admiro de verdad porque, aunque muchas lo hacen por realización propia, pienso que cada una tiene un talento por desarrollar.
Una satisfacción muy grande que me deja estar en este negocio es tener un lugar para hacer felices a los niños, por su puesto cuando iniciamos Chiquitownyo no tenía ni idea de lo que eran los eventos infantiles ni de las necesidades de las mamás y los niños. Hemos atendido a muchísima gente todos estos años y me encanta ver a mis primeros clientes convertidos en adolescentes, familias que conoces en los primeros eventos de sus hijas, después nos contratan para los xv años y sus bodas.
Como mamá-empresaria lo que a mí me funciona es organizar mi tiempo lo más que puedo cuando mis hijos están en clases para hacer mi trabajo y mis cosas personales y así estar toda la tarde y los fines de semana con ellos. Me encanta ir a las piñatas, juntarnos con amigos, ir a los circos, cualquier cosa que disfruten ellos o simplemente estar en casa.
El trabajar desde niña me hizo aprender a estar ocupada todo el tiempo, a ser adaptada a todo, a estar bajo presión, a aprender a resolver problemas, a ser servicial, y eso es lo que estoy inculcando a mis hijos, que sean activos, que las cosas se ganan con esfuerzo, que disfruten cada cosa que hagan. En nuestra vida siempre hay un plan o un lugar a donde ir al día siguiente ya sea de diversión o de familia, y me encanta que son felices y van positivos a todos lados.