Por Deniss Charles
El Bullying en el maltrato físico o psicológico que recibe un niño de manera continua por otros; se caracteriza porque es repetitivo y constante y, puede ir acompañado de intimidación física, hostigamiento y agresión verbal.
Muchos niños que se enfrentan a un acoso escolar, pueden presentar dificultad para denunciarlo, ya sea por que es amenazado o por temor a represalias. Los niños acosados empiezan a dar señales de que están siendo maltratados por otros; muchas de estas señales son físicas, pueden presentar dolor de cabeza o de estómago, insomnio, ansiedad o pesadillas; también pueden presentar problemas académicos y manifestar desagrado hacia la escuela.
Es muy normal el que los padres quieran rescatar a sus hijos ante cualquier problema, podemos caer en el error de querer resolver la situación por ellos y nuestros hijos no podrán aprender a solucionar conflictos. Sin embargo, si la situación ya es de riesgo y tu hijo está en peligro, sí debes de actuar de manera inmediata y platicar con los maestros y directores.
Cuando tu hijo tiene el valor de contarte lo que le sucede, es importante mantener la calma y escucharlo de manera reflexiva y después validar sus sentimientos y agradecerle por la confianza que te ha tenido: “me imagino que te sientes muy asustado, yo también lo estaría si me pasara lo mismo, te agradezco mucho que me lo hayas compartido”.
Una vez que tu hijo te comparta lo que le sucede en la escuela, el segundo paso es capacitarlo. Recuerda que lo mas importante es que tus hijos aprendan a encontrar soluciones ante los problemas y, una manera efectiva de hacerlo, es creando juntos una lluvia de ideas “¿Qué crees que puedas hacer mañana si la situación se volviera a presentar?”. Esta lluvia de ideas pueden incluir desde pedir ayuda al maestro o alejarse de la situación; es mas efectivo si los niños generan estas ideas por ellos mismos, sin embargo, tú también puedes intervenir con mas ideas efectivas. Cuando concluyan esta lista, invita a tu hijo a que elija entre dos o tres ideas para que las pueda poner en práctica. La lluvia de ideas ayudará a entrenar a nuestros hijos en la solución de conflictos; nosotros los padres podemos apoyar dando seguimiento y recordándoles a los niños que estamos ahí para lo que necesiten. En ocasiones a los niños, a pesar de que ya cuentan con la solución, se les dificulta ponerla en práctica; una manera de ayudarlos a que las puedan llevar a cabo es mediante un “roleplaying” en donde puedan escenificar la situación, nosotros los padres podemos actuar el papel de los acosadores para que los niños puedan ensayar las ideas que ellos mismos generaron.
Es importante apoyar a los niños durante este proceso, hacerles sentir que no están solos y que tú puedes ser su guía. Cuando los niños sufren de bullying, nosotros los padres sufrimos juntos con ellos y nuestro instinto paternal nos lleva también a reaccionar con enojo y querer buscar culpables (el niño acosador, los maestros, etc.); sin embargo, el buscar culpables no es la respuesta, tenemos que buscar soluciones efectivas para que nuestros hijos afronten estas situaciones en el presente y en el futuro. Recuerda que un niño acosador también es una víctima, posiblemente este sufriendo de agresión en el hogar.
“Un niño mal portado es un niño desalentado”
