Por Lorena Salas
Para muchos, el conseguir un buen empleo, tener cierto estatus social, ganarse reconocimientos y sobresalir, les representa el sentido de su felicidad, pero para otros, ser felices es contar con el amor de tu familia, de sus padres, pareja e hijos, dejar huella ayudando a quienes lo necesitan y estar cerca de Dios.
Sócrates decía que el secreto de la felicidad no se encuentra en la búsqueda de más, sino en el desarrollo de la capacidad para disfrutar de menos. El ser humano en su mayoría entre más quiere, más infeliz es y esto resulta irónico hasta cierto punto, ya que obtiene todo lo que quiere, pero se queda con ese vacío, esas ganas de más y ¿qué es ese “más”? pues todo aquello que no ve, su interior, sus emociones, las pequeñas cosas que siempre están ahí y no se toman en cuenta como los detalles, el simple hecho de respirar, de movernos, de amar, de ver, oler, sentir, todo eso por lo que muchas veces no se da gracias.
13 consejos para ser felices según Harvard
Recientemente se publicó un estudio avalado por la Universidad de Harvard, en donde Ben Shahar, profesor de la clase de Psicología Positiva llegó a la conclusión de tomar en cuenta los siguientes consejos para conseguir la motivación personal y la felicidad.
- Practica actividad física: Expertos aseguran que hacer ejercicio ayuda a mejorar el ánimo. 30 minutos de ejercicio es el mejor antídoto contra la tristeza y el estrés.
- Desayuna: Algunas personas se saltan el desayuno por falta de tiempo o para no engordar. Estudios demuestran que desayunar te da energía, te ayuda a pensar y desempeñar exitosamente tus actividades.
- Agradece a la vida todo lo que tienes: Escribe en un papel 10 cosas que tienes en tu vida que te dan felicidad. ¡Enfócate en las cosas buenas!
- Sé asertivo: Pide lo que quieras y di lo que piensas. Ser asertivo ayuda a mejorar tu autoestima. Ser dejado y quedarte en silencio genera tristeza y desesperanza.
- Gasta tu dinero en experiencias: Un estudio descubrió que el 75% de personas se sentían más felices cuando invertían su dinero en viajes, cursos y clases; mientras que sólo el 34% dijo sentirse más feliz cuando compraba cosas.
- Enfrenta tus retos: Estudios demuestran que cuanto más postergas algo, más ansiedad y tensión generas. Escribe pequeñas listas semanales de tareas y cúmplelas.
- Pega recuerdos bonitos, frases y fotos de tus seres queridos por todos lados: Llena tu refrigerador, computadora, escritorio, recámara y tu vida de recuerdos bonitos.
- Siempre saluda y sé amable con otras personas: Más de cien investigaciones afirman que sólo sonreír cambia el estado de ánimo.
- Usa zapatos que te queden cómodos: Si te duelen los pies te pones de mal humor asegura el Dr. Keinth Wapner, Presidente de la Asociación Americana de Ortopedia.
- Cuida tu postura: Caminar derecho con los hombros ligeramente hacia atrás y la vista hacia enfrente ayuda a mantener un buen estado de ánimo.
- Escucha música: Está comprobado que escuchar música te despierta deseos de cantar y bailar, esto te va a alegrar la vida.
- Cuida lo que comes. Lo que comes tiene un impacto en tu estado de ánimo. No te saltes comidas, come algo ligero cada 3 o 4 horas y mantén los niveles de glucosa estables. Evita el exceso de harinas blancas y el azúcar. ¡Come de todo! Varía tus alimentos.
- Arréglate y siéntete atractivo: ¡Ponte guapo! El 41% de la gente dice que se sienten más felices cuando piensan que se ven bien.
Podrán darnos una lista interminable de consejos para ser felices, pero depende sólo de nosotros el serlo, no podemos depositar nuestra felicidad en algo o alguien más ni hacer que otra persona se encargue de esto. Si nos resulta complicado encontrar algo que nos alegre o motive el día, detente un momento a pensar en todo lo que tienes, agradece y respira, estas vivo y eres pieza clave en este mundo.
Trascender, evolucionar, permitirse fallar, perdonarse, aprender a soltar, tener humildad para aceptar nuestras fallas, fluir con el Universo, fortalecerse en nuestro Ser Supremo, esas son para mí las claves para el éxito personal que conlleva a un estado de felicidad absoluta que se construye día a día, sólo basta dar gracias por todo lo que sí tenemos, respirar y vivir este día como si fuera el último de nuestra vida.