Por Ivonne Orozco
Relacionamos las verduras y las frutas con el calor. Las verduras también hacen una función importante en temporadas frías al igual que las frutas.
Los caldos, las sopas , los ponches, alimentos ricos para cubrirnos del frío y dejar el alma calientita.
Las verduras jamás deben ir bien cocidas, deben de llevar una cocción mínima. Ejemplo: Si vas a realizar una sopa de verduras, primero deja que hierva el fondo, después se incorporan sólo por 10 minutos y a fuego lento. Esto aplica en papas y zanahorias si están cortadas en trozos pequeños. Las verduras tampoco se cocinan con mucha agua, ya que por si mismas están compuestas de agua. Se ponen casi al vapor y esto dará un término crujiente. Ahora con el veganismo, muchas personas ya no aderezan sus verduras con mantequilla, un toque de miel maple, aceite de oliva o ajonjoli te darán uno riquísimo. Vamos con las cremas, si eres vegano, puedes elaborarlas con leche de almendras o amaranto y usar una papa cocida nos sirve para espesar la crema. La nuez moscada, la pimienta aportan un sabor muy rico.
El apio, el cilantro, el perejil, el romero son algunos de los perfumes que podemos usar para dar un sabor óptimo a las verduras.
Ahora bien los ponches de frutas, la manzana, la guayaba aromática, la jamaica, la canela, mandarinas, tejocotes, hacen del ponche no sólo una bebida decembrina, es una bebida invernal que aporta vitamina C al organismo ayudando a evitar las molestas gripas. Igual que el té de jengibre con su limón y miel.
El betabel, la coliflor, el brócoli con ellas se pueden hacer ensaladas a vapor deliciosas. No te esperes al verano, mejora tus defensas con infusiones, tés, calditos, sopas. Dale calorcito a tu alma y al de tu familia.
