Por Lorena Salas
Todos en algún momento de nuestra vida nos hemos cuestionado el por qué nos pasan ciertas cosas, vivimos con angustia, tristeza e incluso ira tratando de encontrar la respuesta a lo que atravesamos, pero a veces la llave a todas nuestras inquietudes se centra en hacernos esta pregunta “¿para qué nos pasa esto?”.
De nadie más que de ti mismo depende el seguirse lamentando por aquello que no pasó, por duro que parezca ahora debemos entender que así tenía que ser y que es gracias a esto que vendrá toda tu evolución y aprendizaje para dar paso a lo nuevo.
Quedarse en el plan de víctima podría llevarse años e incluso una vida entera, pero si en vez de estarte preguntando “¿Por qué siempre me pasa esto a mí’?” a “para qué me está pasando esto y qué puedo aprender de esta situación?”, entonces podrás cambiar todas esas memorias que están ahí programadas para recibir sólo experiencias traumáticas o tristes según tu manera de verlas, a momentos que te confronten con tu verdadero ser y te impulsen a tomar consciencia para trascender y evolucionar.
Cuando vivimos situaciones que nos hacen cuestionarnos absolutamente todo, es ahí donde por increíble que suene, lo teníamos que vivir, así es la vida de perfecta con sus días llenos de luces y sombras. ¿Qué sería de nosotros sin estas confrontaciones? A veces, todo depende del ángulo desde donde se mire y depende de ti cómo quieras mirarlo, ahí también están las respuestas.
¿Cómo aprender a verle lo bueno a lo malo? Empezando por agradecer lo que tienes y vivir como si no hubiera otro mañana. Lamentarte sólo te hundirá más en ese ciclo sin fin de carencia y fatalidad. ¿Para qué me pasa esto? Ahí radica todo, ahí está la búsqueda de tu propósito en esta vida y entonces todo cobra sentido.
Tomar la vida como viene es quizá la mejor forma de aceptar ahora tu realidad, lo que pienses y construyas hoy será la base para tu futuro, así que la opción es aprender a ver la bendición detrás de la aflicción, siempre está ahí por difícil que parezca, por más noches obscuras que vengan siempre aparece la luz, basta con ver tu poder y capacidad de sobrevivir a todo, desde que nacemos ya pudimos pasar esa línea delgada entre la vida y la muerte, ¿no crees que eres capaz de pasar cualquier otra cosa?