LA FALTA DE PERDÓN ES LETAL

Por Cristina Aguirre

No existe en el mundo un ser humano simple. Todos dentro de nuestro ser peleamos batallas casi todos los días.

Hoy quisiera hablarte de la falta de perdón. Y cómo este obstáculo puede retrasar nuestro proceso personal de crecimiento. Yo pasé por esta etapa, en la que guardaba las ofensas… casi esperando que llegara quien me lastimó a pedirme perdón. Pero, ¿qué pasa si no sucede?

Imagina una herida causada por alguna ofensa. Entonces la persona afectada (la víctima) comienza a darle vueltas al asunto a tal grado que llega a pensar hasta diferentes versiones de este suceso y lo peor del caso es que muchas veces, sin querer, hasta distorsionamos en nuestra mente un poco la escena por cómo lo percibimos y entre más lo externamos más vamos creyendo que nuestra postura no debe de cambiar.

Así que la herida comienza a infectarse.

Pero resulta que todos los días esta infección sigue dando molestia ya que la persona ofendida comienza a regalarle al victimario bastante tiempo pensando en lo mucho que le afecto o el daño que le ocasionó.

Así que esta infección se vuelve un tumor que va invadiendo La Paz interior, La Paz mental inclusive la Salud. (Existen estudios en los que hablan que los sentimientos no procesados, producen efectos secundarios en la salud, directamente en órganos vitales, el enojo, el coraje, el rencor son un detonante para enfermedades letales).

Qué ironía pensar que todo esto lo causó un agente externo, (muy importante, o poco importante o hasta en ocasiones irrelevante)…. pero que el daño más severo lo ocasionó la misma persona que fue ofendida. Si. EL DAÑO MÁS GRAVE LO HACEMOS NOSOTROS MISMOS Y NO LA OTRA PERSONA.

El perdón sana y libera.

La falta de perdón no solo opaca lo que percibimos sino que poco a poco va envenenando nuestro sistema ( en todos los aspectos).

Algunas personas creen que hay como un hilo que se crea con aquellas qué hay algún tipo de enemistad fuerte (y no creo sea un buen hilo) … ósea que ese enojo ese rencor produce una unidad con alguien que no se desea. Así que bueno si quieres verlo así, estás enganchado con esa persona que te hirió y tienen un lazo en común. Tu falta de perdón y esto verdaderamente es una discapacidad.

Perdonar no es nada fácil, el ego es una cosa espantosa que muchas veces estorba para adquirir este atributo maravilloso. Pero si le explicáramos al ego qué no es por perdonar a la persona sino liberarte a ti mismo, tal vez cambiarían las cosas.

“Ego, ¡¿si te calmas?! Necesito vivir plena y feliz así que bájale dos rallitas a tus profanos pensamientos, que para neutralizar al enemigo necesito borrarlo de mi sistema perdonando.”

Yo le diría a la persona que esté viviendo una situación fuerte, “sé que duele pero eres más importante tu”. ¿Por que permitir que una persona qué tal vez ni si quiera esté pensando en ti, afecte tu día pero sobre todo tu paz?.

Es como si al perdonar inmediatamente te estuvieras deshaciendo de todo ese desmadre que te dejo la otra persona. “Esto no es para mi. Soy valioso, hago mi mejor esfuerzo. Lo que haga o deje de hacer el otro individuo, no es problema mío”, una vez cortado el listón es todo responsabilidad de aquel (y eso no nos interesa).

Y quisiera hacer énfasis en que el perdonar no es volver a aceptar en tu vida a alguna persona . El perdonar no es tampoco aceptar debilidad o menos valor. El perdonar es parte de la autoayuda que necesitas para liberarte de toda esa cagadera que definitivamente NO ES PARA TI. Comienza a romper esa liga que te une con esa persona perdonando, no por el, no por ella, por ti y para tu propio beneficio.

La vida es muy pesada, como para estar cargando entes innecesarios.

Y si esa persona es importante para ti, date tiempo, vive tu proceso de perdonar y soltar verás que cuando menos te imagines y ya lo hayas logrado podrás ver a esa persona sin el sentimiento de estallamiento de viseras (que estoy segura no es nada placentero).

Tu vida será más cómoda y ligera.

Yo te invito a que dejes de analizar tanto, en lo que dijo, hizo o como te dolió. Ordénale a tu mente “no pienses más y suelta” y repítelo las veces que sea necesario. Que nada es más valioso que tu propio bienestar.  Ya existen bastantes libros de autoayuda acera de este tema.  No dudes en buscarlossi crees que es difícil lograrlo por ti mismo.

Hoy por ti, da el primer paso.

Cristina Aguirre

Soy licenciada en derecho, esposa y madre de tres hijos. Actualmente estoy laborando en una empresa familiar restaurantera, junto a mi esposo. Comencé a escribir como DESAHOGO en mis muy, muuuuy reducidos tiempos libres; escondida en la lavandería, mientras los niños dormían. Gracias por la oportunidad, en especial a todas aquellas mamás que me impulsaron a hacer esto.

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