Por Lorena Salas
En infinidad de ocasiones he escuchado que hay que cuidarse de las personas tóxicas, pero ¿qué las vuelve así? ¿Te has preguntado alguna vez que tal vez vienen a mostrarnos el reflejo de lo que realmente nosotros traemos en nuestra vida?
Para entender bien el concepto de toxicidad, hay que ir más profundo. De acuerdo a la Real Academia Española, la palabra ‘tóxico’ proviene del latín y del griego significa “veneno” o “veneno para emponzoñar las flechas. Venēnum o veneno, se refiere a una sustancia que introducida en un ser vivo, es capaz de producir graves alteraciones funcionales e incluso la muerte. La palabra “veneno” también se utiliza para señalar un sentimiento negativo como la ira o el rencor.
Estar en constante ataque hacia todos, viendo siempre la parte mala y fatalista de cualquier situación, descargar la rabia, amargura y coraje sobre los demás, vivir en el pasado quejándose de absolutamente todo, criticar, juzgar, inventarse mil y un historias y buscar a toda costa un culpable, eso es precisamente lo que vuelve tóxico a una persona.
¿Cuántas veces hemos tenido a una persona así cerca? ¿Cuántas veces hemos sido nosotros quienes hemos actuado de esa misma manera? Todo en este mundo es un reflejo y todo viene a resonar en lo que decimos y hacemos. Si toda tu vida has creído que eres el personaje de la víctima de situaciones o personas tóxicas, déjame decirte que toda esa serie de acontecimientos repetitivos, no son más que un llamado de alerta que te están gritando: “¡ya ponles un alto!”, eres tú quien fomenta la toxicidad, tú quien permites que el otro descargue en ti todo su veneno, ¿te lo habías alguna vez planteado de esa forma?
Alejarse de la toxicidad en tu vida conlleva mucho tiempo de trabajo personal, de buscar tu equilibrio y paz mental, y sobre todo de mucha conciencia, es salir siempre de tu zona de confort para enfrentarte a tus propios demonios y toda tu herencia transgeneracional y cuestionarte ¿qué me quiere enseñar la vida con todo lo que he experimentado?, ¿qué debo cambiar en mí para dejar de repetir patrones y atraer nuevas y mejores cosas a mi vida?
El primer paso es quizá el más difícil, invertir los papeles de víctima y victimario, finalmente todos somos víctimas de víctimas en esta rueda de la fortuna llamada vida, no creo que nadie quiera vivir en su propio veneno a menos que quiera morir en vida, y es así como decido hoy y siempre liberarme del rencor, amargura, enojo, tristeza, incertidumbre y vibrar en el amor, tranquilidad, paz y sobretodo en la certeza plena de atraer lo mismo de vuelta.