Por Clara F. Zapata Tarrés
En este fin de año, probablemente tendrás algunos festejos y salidas. Es importante que tengas información a la mano para tomar las decisiones pertinentes a la hora de amamantar y de consumir alcohol.
Si has decidido amamantar, es importante priorizar la relación con tu bebé. En general, la cultura de la lactancia hace que las personas que se encuentran a nuestro alrededor tengan otras costumbres y piensen que los bebés no tendrían por qué participar en estos festejos. Cuando amamantamos es difícil dejar a nuestros bebés pero muchas madres y familias que deciden que la lactancia sea el camino de crianza, se adaptan y llevan a sus bebés a las fiestas y celebraciones. Esto ayuda a que la relación entre mamá y bebé se reproduzca de tal manera que los dos se vayan conociendo y acostumbrando y a la hora que van creciendo todos pueden disfrutar de su compañía mutua. Por otro lado, si llevas a tu bebé tu producción de leche está equilibrada y evitas las congestiones mamarias.
Otra de las cosas que suceden mucho y que tienen que ver con lo mismo es que a la hora del festejo, probablemente todos querrán cargar a tu bebé para “hacerte más alegre o cómoda la celebración”. Muchas veces esto nos hace sentir incómodas o incluso nuestro bebé puede inquietarse o sentirse muy abrumado. En lugar de esto, puedes proponer que para que estés más contenta y disfruten plenamente tú y tu bebé, las personas a tu alrededor pueden atenderte mientras tú estás amamantando o cargando a tu bebé. Si el festejo es en tu casa, puedes pedirle a algún familiar que sea el anfitrión, que te lleven varios platillos para no tener que cocinar tanto y que cuando sea la cena, te pasen las botanas y te sirvan tu plato. Verás que pasarás una noche de consentimiento y de tranquilidad.
¿Qué sucede con el alcohol? ¿Podemos beber y amamantar? ¿Qué cantidad? ¿Cómo se elimina el alcohol y en cuánto tiempo? Aquí algunas sugerencias y datos que te permitirán disfrutar:
- El alcohol no es recomendable en ninguna etapa del embarazo. Puedes disfrutar de varias bebidas creativas pero sin alcohol.
- Si estás amamantando a un bebé muy pequeño también es preferible evitar beber alcohol.
- Después de los 3 meses de tu bebé puedes beber ocasionalmente. Lo ideal es que justo después de amamantar tomes tu bebida y esperes el tiempo necesario para volver a dar pecho.
- El alcohol consumido pasa rápidamente a la leche materna, en un nivel igual o superior al de la sangre, pero también los niveles descienden rápidamente ya que el alcohol no se acumula en la mama.
- El tiempo necesario a esperar a amamantar para que el alcohol ingerido de forma ocasional haya desaparecido de leche y sangre depende del peso de la madre (a menor peso, más tiempo) y de la cantidad de alcohol consumido (a mayor alcohol, más tiempo). Evitar dar pecho hasta después de dos horas y media por cada 10-12 grs de alcohol consumidos: un tercio (330 ml), de cerveza 4,5%, un vaso de 120 ml de vino 12% o una copa de 30-40 ml de licor de 40-50%).
- No es necesario extraer y tirar la leche después de beber alcohol, excepto para el alivio de los pechos de la madre: extraer y tirar la leche no aceleran la eliminación del alcohol de la leche.
- Si estás lejos de tu bebé, trata de extraer con la frecuencia que tu bebé generalmente amamanta (esto es para mantener la producción de leche, no por el alcohol). Como mínimo, extrae manualmente cada vez que te sientas incómoda; esto te ayudará a evitar conductos obstruidos o mastitis.
- Recuerda que el alcohol NO aumenta la producción de leche y se ha demostrado que inhibe la bajada y disminuye la producción de leche. Algunos estudios muestran que el alcohol inhibe la secreción de la prolactina, hormona de la producción de la leche, durante unas dos horas. El consumo agudo seda al lactante e inhibe la secreción de oxitocina de la madre y por tanto el reflejo de eyección de la leche, reduciendo la producción de leche entre un 10 y un 25%.
- No practicar colecho con el lactante si has bebido UNICEF, 2006, ABM 2008, Landa 2012, UNICEF 2013). Nunca compartas una cama u otra superficie para dormir con tu bebé si has estado bebiendo. Beber afecta tus reflejos naturales, y beber y compartir la cama tiene una mayor asociación con el síndrome de muerte súbita del lactante (SMSL).
¿Qué pasa si bebes demasiado?
- Si has bebido tanto alcohol y te sientes desorientada, no amamantes hasta que estés sobria. Asegúrate de que alguien que no esté intoxicado esté presente para cuidar a tu(s) hijo(s). Si es posible, extrae tu leche para mayor comodidad y para ayudar a mantener tu producción. Consumir alcohol en exceso no se recomienda durante la lactancia.
¿Quieres comprobar la información?
http://www.e-lactancia.org/breastfeeding/ethanol/product/
La decisión está en tus manos. No dudes en llamar a una Líder de la Liga de La Leche si es que tienes más preguntas.
www.laligadelaleche.org.mx/directoriolllmx