Por Daniela Montes Valdez
La capacidad de amar es una virtud que todo ser humano posee y esta se encuentra dentro de cada uno de diferente manera, pero lo que nos hace iguales es el amor, así como existe esta capacidad de amar también existen diferentes tipos de amor, como los son: el amor a nuestros padres, a nuestra pareja, a los que somos padres hacia nuestros hijos, a los amigos e inclusive a las mascotas y todos podemos tener un mayor o menor sentimiento por alguien dentro de nuestra vida y así mismo la valentía de amar a quien no pertenece a nuestra sangre, inclusive a nuestra especie y es que las mascotas que podemos rescatar se vuelven también pare de nuestra familia.
En este mundo existimos todo tipo de personas, desde las que tienen un amor propio desproporcionado y no hay nadie que importe más que sí mismos, hasta las personas que no tienen amor propio y lo van buscando de relación en relación o se dan por completo sin entender que primero hay que quererse nosotros, recuerda que no podemos dar lo que no poseemos.
Te invito a reflexionar sobre cuánto te amas y cuánto amor puedes dar a los demás. El amor no consiste en actos materiales, sino en sentirte libre con la otra persona, el ser empáticos y ver por la necesidad del otro y solamente por las mías, es dar sin esperar que lo que enviamos regrese a nosotros, y eso es fundamental en la adopción, no solo es pedir un hijo porque necesito cubrir mi necesidad de ser madre o padre, sino el dar el amor incondicional y necesario a un niño, o adolescente que lo necesita, es dejar de lado los prejuicios sobre “ como vendrá este niño o niña” o la idealización que esto se dará como en las películas donde el amor se hace mágicamente posible y vivirán felices por siempre.
La capacidad de amar en la adopción debe ser incondicional e infinito, porque todos los niños como nosotros traen una historia acuestas y por lo regular no son historias bellas sino de dolor, abandono y muchas ocasiones de soledad, y nuestra capacidad de amar debe ir más allá de todos los comentarios, las actitudes y en ocasiones los desplantes de estos chicos, debemos aprender a ser asertivos en las muestras de amor de los demás, porque al ser únicos ninguno tendrá la respuesta del otro que queremos o esperamos, pero en el caso de la adopción hay muchos detalles que nos pueden demostrar amor por parte de nuestros niños, adoptar no solo es un acto de amar y una demostración de la gran capacidad de amor que tenemos, sino también de la fortaleza que poseemos.
Recuerda que no estás Sola y el proceso de adopción solo es un paso en tu camino para llegar a la meta de tener una familia.
Te deseo que todo lo bueno de la vida te abrace y se quede contigo.