Por Liliana Mendoza
Mucho se ha dicho que la felicidad depende de nosotros, muchas cosas dependen de nosotros y las que no es importante tratarlas en terapia. Para las cosas que están en nuestras manos te comparto algunas acciones que en lo personal me ayudan cuando ando un poco apagadona o triste:
- Duerme temprano, no ayudas a nada ni a nadie si obligas a tu cuerpo a quedarte despierto hasta más tarde cuando sabes que tu mente y tu cuerpo necesitan un descanso.
- Toma tus vacaciones en serio, los días que son de descanso, las vacaciones que te tocan generalmente las usamos para desvelarnos, salir y así, está bien salir pero úsalas para un descanso en serio. El solo hecho de cambiar de rutinas ayuda al cuerpo y a la mente a descansar.
- Regálate el tiempo para cocinar un buen platillo al menos una vez a la semana, en lo personal me encanta prepararme de desayunar con calma los fines de semana.
- Toma un segundo (si un segundo) para tener un pensamiento positivo sobre ti, siempre encontrarás algo bueno que decirte, te lo juro.
- Sal de tu casa por las mañanas con la cama tendida, mi mama siempre me ha dicho que dejes tu casa como te gustaría encontrarla cuando llegues, es muy placentero llegar y ver la cama tendida y la casa recogida, es una buena forma de empezar el día.
- Toma más agua, ten a la mano una botella de agua, toma infusiones, tecitos, siempre caen bien.
- Procura no llevarte el trabajo a casa, desconectarse del trabajo es muy difícil, seguimos enrolados con todo lo que paso y queremos adelantarle, mi mamá siempre dice que tu mente este donde tu cuerpo está, si estás en tu casa con tus hijos que tu mente este allí.
- Siempre desayuna, es un hábito fácil de cumplir, procura hacerlo en casa para evitar gastos hormigas y desayunar mal.
- Llora cuando sientas ganas de llorar, reprimir nuestros sentimientos siempre repercute de muchas maneras que no nos hace bien.
- Busca con quien hablar de lo que sientes, una amiga, un especialista, alguien en quien confíes y te sientas protegida.