Por Daniela Montes Valdez
Al hablar del duelo automáticamente viene a nuestra mente la pérdida de un ser querido, pero este proceso también se da cuando pasamos por el proceso de darnos cuenta que biológicamente no podremos convertirnos en madres. Es un proceso que en la mayoría de las ocasiones no tomamos así y no se menciona tanto cómo se debería.
En mi caso particular cuando me convertí en mamá por primera vez, todas las personas me daban consejos, me felicitaban y era algo que se celebraba. Pero cuando pasó el tiempo comenzaron las preguntas incómodas y típicas sobre para cuándo tendría el siguiente, que si no se me hacía que era tiempo de agrandar la familia, etc.
Estos comentarios para una pareja o una mujer que está pasando por un proceso de fertilidad o la cual está en el proceso de aceptar la infertilidad son más que hirientes y logran poner en un estado emocional muy complicado.
Ya que la pérdida de la posibilidad de ser padre o madre biológicamente es algo para lo que no estamos preparados, es una situación dolorosa, y que por las normas sociales y por lo personal que es no se trata de manera abierta por eso es importante conocer que esta situación se debe manejar con el apoyo de personas de confianza y cercanas, inclusive con un profesional si es necesario. La depresión que puede causar el tener una amiga o familiar que está embaraza es muy grande y es donde nos preguntamos, renegamos y nos rehusamos a entender por qué otras personas pueden y nosotras no y no por el hecho de ser nosotras únicamente las que podamos tener un problema sino nuestra pareja también pero al ser eso una pareja entendemos que el problema de uno es del otro también.
Es de suma importancia entender que no somos culpables de esta situación y sobre todo perdonarnos por no poder dar vida, porque existe otra oportunidad de ser padres y es por medio de la adopción que podemos sentir ese amor de padres que tenemos esperando entregar, pero con la consciencia de que este niño o niña no es un reemplazo o un “premio de consolación”, por lo tanto debemos pasar este proceso de duelo para llegar conscientes y estables emocionalmente para ser padres de un niño con necesidades de amor y cuidado muy grandes.
Recuerda que no estás sola, y así como te sientes muchas mujeres nos hemos sentido y así como pudimos superar estas pérdidas tú también lo lograrás. Si requieres apoyo, o simplemente platicar con alguien que haya pasado por esto no dudes en contactarme, mi número es (844)247-6783
A ti que me lees te deseo que todo lo bueno de la vida te abrace y se quede contigo.