Por Champaca Treviño
El mundo está paralizado. Los lugares que una vez estuvieron llenos ahora lucen vacíos.
Han cerrado fábricas, colegios, se han impuesto restricciones a los viajes y se han prohibido reuniones de festejos y trabajo.
¿Cómo será la vida después del coronavirus? ¿Qué decisiones necesitaremos tomar?
Cuándo terminará y de qué forma podremos seguir con nuestras vidas es un tema lleno de incertidumbre y cuestionamientos. He podido leer muchos comentarios que mencionan, cuando levanten la contingencia voy a hacer una gran fiesta, me voy a ir de viaje, voy a visitar a todos mis familiares, voy a regresar al gimnasio, y yo me pregunto si realmente las cosas serán así, si cada uno de nosotros sentiremos esa paz para sin ninguna limitante o cuestionamiento acudir a una fiesta sin temor o preocupación, ir al supermercado sin restricciones, llevar a los hijos al cine, en lo personal no creo que sea así de sencillo.
La amenaza de una enfermedad que ocupa parte importante de nuestros pensamientos, durante semanas interminables artículos, noticieros, información permanente en los medios sobre la pandemia, las fases, los contagios, los descensos y entonces el miedo al coronavirus ha cambiado la psicología y nuestras emociones.
Trastornos del sueño, en la alimentación, ansiedad y porque no decirlo en compras compulsivas de gel, sanitizantes, papel higiénico y cerveza, claro ya le puse palomita a todas estas situaciones en estos días de la cuarentena, somos seres humanos y nos dejamos llevar por muchas cosas, sin embargo, pasan los días y hay personas que mencionan su estado anímico no es el mismo de hace un mes.
Imaginemos el estado anímico dentro de un mes, dos, tres, cuatro o los que sean necesarios, miedo, ansiedad, psicosis, dudas, incertidumbre, tensión, frustración por mencionar algunas estarán presentes cuando nos digan ya podemos salir a realizar nuestras actividades normales, pero bajo otra normalidad, en donde los cambios de la higiene personal, en la ropa, calzado, alimentos y muchas otras cosas tendrán otra prioridad y perspectiva, cuando tiempo nos tomará sentir una paz en una reunión, en un concierto, en dar y recibir abrazos y saludos como lo hacíamos antes no lo sabemos.
Esto pasará y nos hará más fuertes indiscutiblemente, es cuestión de tiempo, pero no podemos descuidar nuestra salud mental y prevenir como reorganizar nuestra vida hacia una nueva forma de vivir en casa, en el trabajo, con las amistades y familiares, es un hecho y todo cambiara.
En nuestro próximo articulo platicaremos del control y manejo del estrés increíble herramienta para poder tener en un control positivo nuestras emociones, porque si bien la gente le teme a la palabra estrés, este también tiene una connotación positiva en donde nos permite estar alertas, ser más productivos, innovadores, creativos, salir de la zona de confort, tomar retos, superar obstáculos y en ello es en donde nos vamos a concentrar, en las grandes áreas de oportunidad de mejora personal que conllevan este cambio mundial.