Por Clara F. Zapata Tarrés
Del 02 al 07 de noviembre la Liga de La Leche México realizó su XXXII Congreso Internacional: Lactancia Materna en Situaciones Especiales. Cuando la lactancia es un reto.
Ha sido una semana muy intensa, por un lado, por la organización que hay detrás de la planeación de un evento virtual de esta magnitud, pero también por el contenido de todas las conferencias que disfrutamos escuchar.
Detrás de las historias de lactancia hay mucho por escarbar. Regularmente, cuando apenas planeamos un embarazo y obtenemos información, recibimos mensajes muy diversos que se resumen en “Amamantar es fácil/difícil”; “Pégate a tu bebé”; “Duele pero te vas a acostumbrar”. La cantidad de información y los mitos alrededor de la lactancia podría ser infinita. Cada día puede llegar algo nuevo. Por ello, es necesario estar al día, participar de los grupos de apoyo y saber que es muy importante, tanto escuchar a los expertos, pero más aún, mirar, observar y adentrarnos a este nuevo mundo, formando una red de apoyo que nos permita saber a qué maravillas, preguntas, retos, metas nos podemos enfrentar.
¿Qué vivimos?
Sin duda, este congreso nos dio la posibilidad de ver más allá de las primeras impresiones. A través de 18 conferencias de una gran diversidad de profesionales, pudimos profundizar la reflexión en torno a las situaciones especiales que rodean la lactancia.
En primer lugar y me parece que de relevancia esencial, se desmenuzó el poder que tienen las palabras y sus significados al hablar de lactancia. Todos tenemos el deber de fortalecer y crear cambios culturales que normalicen la lactancia al respetar la decisión de la madre y su bebé de amamantar. Las palabras son poderosas y estamos invadidos de imágenes, frases, mensajes que podrían influir de manera muy potente en nuestras decisiones: chupones, bebés solitarios en sus cunas, biberones, fórmulas supuestamente maravillosas. Así, comenzamos este congreso con una gran advertencia. Todos, como madres, familias, acompañantes, parejas, profesionales de salud, necesitamos desmitificar estas ideas que nos rondan constantemente y sobre todo reconocer el poder que tienen nuestras palabras al acompañar una, dos, tres, …cien… lactancias.
Por otro lado, normalmente no se suele hablar de los retos que existen precisamente en situaciones especiales. Durante estas jornadas, se abordaron temas referentes a los riesgos de los sucedáneos de leche materna y los símbolos a su alrededor, los sentimientos que puede tener un bebé al nacer, todo lo referente a bancos de leche en hospitales y las experiencias sensibles del personal de salud con bebés en cuidados intensivos y el rol tan importante de la familia en estas circunstancias.
También se tocaron dificultades específicas a la hora de amamantar: frenillo, cólicos, transferencia de leche, bajo peso del bebé, sobrepeso y lactancia, la alimentación de la madre, cirugía de reducción de mama, relactación, lactancia inducida, diferida así como lactancia compartida. Temas de los que poco se habla y que definitivamente tiene repercusiones en la lactancia fueron: la salud mental de la madre y amamantar más allá de los dos años desde la mirada de las niñas y niños que la viven en carne propia.
¿Qué aprendimos?
Ha sido un encuentro de grandes aprendizajes en el que muchísimas personas de cada rincón de México y también de varios países pudieron disfrutar pero, sobre todo, llevarse información que tal vez presencialmente, no hubiera sido posible. Vimos algunas de las ventajas de este confinamiento que ya cumple su octavo mes. Esperamos que podamos seguir promoviendo, defendiendo y compartiendo todos juntos la importante de la lactancia, para construir y reconstruir este gran equipo tan necesario para la salud de niñas y niños.
Reto enorme, oportunidad invaluable.
Si quieres más información puedes revisar: https://laligadelaleche.org.mx/xxxii-congreso-internacional-que-la-liga-de-la-leche-de-mexico/
