Por Cynthia Salas
Ayer fue mi cumpleaños y hoy se publica mi columna, así que pienso que nada es casualidad. Tenía mucho tiempo queriendo enlistar algunos aprendizajes que he tenido, para luego leerlos con el tiempo ya que pienso que es de las principales ventajas de escribir. Es como si congeláramos un pensamiento, porque puede que después lo olvidemos, cambiemos de parecer, nos demos cuenta lo equivocados o lo acertados que estábamos y ¿por qué no? encontremos algo de sabiduría en nuestro “yo” del pasado.
Así que para celebrar treinta y tres años vividos, aquí dejo en el congelador, 33 aprendizajes que quizá te sirvan a ti también.
1. Tu diálogo interno es lo más importante. Lo que te dices y te repites a ti misma a diario, al salir de tu cama, al comenzar el día, al iniciar un nuevo proyecto, al verte al espejo, al estar en una relación, es más importante de lo que imaginas. Puede ser eso que te levanta o te hunde. Imagina cómo cambiaría tu vida si cada mañana al mirarte al espejo te repitieras: “tú puedes”, “lo vas a lograr” y todas las afirmaciones positivas que estás esperando de alguien más.
2. Todo pasa. Sobre todo, lo malo. Esos momentos de tristeza, depresión, desesperación, son eso, momentos y cuando menos lo esperes habrán quedado atrás.
3. Paso a paso. No esperes salir de los momentos difíciles, de un día para el otro. A veces levantarse de la cama y tomar un baño es un gran paso ya.
4. Visualízate. Aprendí esta técnica el año pasado con mi coach Brenda Castillo. Visualíza lo que quieres lograr, ten claridad sobre a dónde quieres ir. No tiene que ser el plan maestro de tu vida o puede ser que sí, pero tener claridad sobre cada paso que quieres dar te llevará a lograrlo.
5. Aprende a dejar ir. Abraza los nuevos comienzos, el planeta tierra está en constante movimiento, no hay un minuto que se quede inmóvil, así que es imposible que nuestra vida lo esté, aprende cuando una etapa terminó, cuando otra comienza, cuando alguien se va de tu vida, disfruta cuando alguien llega. No te aferres ni a las cosas, ni a las personas, siempre llega lo que necesitas en ese momento de tu vida.
6. Confía. Tener fe es lo que nos saca adelante en momentos difíciles, no importa cuál sea tu creencia, la espiritualidad es lo más divino que tenemos dentro de nosotros, eso que nos sostiene en un mundo que muchas veces se pone incomprensible. Así que cuando no tengas idea sobre qué hacer o qué pasará, solo confía, hay algo mucho más grande sosteniéndo tu vida.
7. La edad es lo menos importante de este mundo. Olvídate del “ya no tengo edad” cuando quieres hacer algo realmente, yo por ejemplo ya no disfruto ir a antros y salir de madrugada oliendo a cigarro, pero todavía pido el “Combo Kids” en Carl´s Jr y me emociono cuando me entregan un cono. Tampoco aguanto desveladas maratónicas como antes, pero comencé a estudiar piano a esta edad y lo estoy amando, mientras te haga sentir muy bien, ¡claro que tienes edad para ello!
8. No te compares. La comparación es enfermiza, es horrible, veelo como un virus que puede atacar tu cuerpo e impedirte realizar cosas enormes, diferentes, creativas y divinas. ¡Eres única!.
9. Lee. No importa si hoy eres muy joven y muy guapa, la mente es lo más atractivo que tendrás por siempre si logras cultivarla y te podrá durar hasta 99 años ¡o más!.
10. Nunca es tarde. Realmente nunca lo es, para iniciar algo nuevo, a veces pensamos que debemos hacer absolutamente todo en este mundo antes de los 25 años, y que después de ahí el resto de nuestra vida se trata de ser completamente estables, para empezar no creo que alguien lo haya logrado, y después ¿por qué habría de ser así?.
11. Date tú lo que tú necesitas. Desde comprarte una cena deliciosa a tí misma, hasta descanso y comprensión, como mujeres tendemos a “sacrificarnos” por los demás, pero el mundo no se cae si paras por un momento y te lo regalas a ti misma. (aunque tal vez regreses y tu hijo más pequeño tenga un chichón nuevo, el perro haya destruído la basura y tu esposo no haya cerrado con llave la casa…)
12. No permitas que nadie te haga daño. Simplemente no lo permitas, no todas las personas se dan cuenta de que están lastimando a los demás, cada quien carga con sus heridas, pero tú sí sabes cuando algo te lastima a ti y muchas veces será imposible que esa persona se dé cuenta o se detenga. Aléjate y hazlo mientras todavía estés a tiempo.
19. Busca tu equilibrio. Solo tú sabes cuál es, dale prioridad. A veces es estar sola, en silencio y meditar. Algunas otras es salir y tomar una(s) copa(s) de vino con tus amigas.
20. Dí NO al perfeccionismo. Intentar ser perfecta me ha hecho lastimarme muchas veces, juzgarme, sentirme insuficiente y dejar de hacer muchas cosas que quisiera, la perfección es difícil de alcanzar, búscala, intenta hacer las cosas lo mejor posible, pero no te obsesiones, mil veces estás haciendo las cosas bien y tú no te das cuenta, solo hazlo.
21. Sana la relación con tu cuerpo. No pases una vida deseando tener más de esto, menos de aquello, es un desperdicio de tiempo. Siempre que voltees atrás en el tiempo vas a darte cuenta de que estabas mejor de lo que creías en ese momento. Disfrútate, ámate, nútrete, ejercítate, date lo mejor, nada es más atractivo que una mujer que se ama.
22. Borra de tu diccionario la palabra “DEBERÍA”. Cada quien vive su proceso, cada quien es distinto, pensar en lo que ya deberías haber hecho te impide enfocarte en lo que realmente necesitas estar haciendo tú, lo que te hace bien a ti.
23. Hazle caso a tu intuición. Seguramente ya te has dado cuenta cuantas veces tiene la razón, así que este es solamente un recordatorio. La intuición es una manera mágica de decirnos por dónde ir, por dónde no, sobre qué tener cuidado, en quién confiar. Síguela.
24. Hazle caso a tu cuerpo. Más que comprobado, el cuerpo tiene maneras de hablarnos, las enfermedades, ansiedad, cansancio, dolores, son maneras de decirnos que algo no anda bien y que lo hemos dejado pasar por demasiado tiempo ya. Detente, escucha a tu cuerpo, pero sobre todo, hazle caso, modifica hábitos y decisiones si es necesario.
25. Busca tu felicidad incesantemente. Voy a decir algo que quizá te haga dejar de leerme y abandonar la lista, pero tu esposo o tus hijos, no son tu felicidad completa, son una parte de ella, sigue buscando, eso que te hace feliz. No hablo de abandonar tus deberes, si no de seguir buscando ese “hobbie”, ese “momento del día”, ese “algo” que te hace feliz a ti y nada más que a ti. Recientemente lo encontré en la música y descubrí que era un “algo” que buscaba sin saber y que me conecta con una parte de mi felicidad que nada ni nadie más me lo da. Busca, hasta encontrarlo, todos nacimos para ese “algo”.
26. Elige de qué llenas tu mente. Hoy en día tenemos demasiadas distracciones a nuestro alrededor, de-ma-sia-das. Noticias, chismes, tutoriales, fotos, ideas, etc, todo en un segundo en la palma de nuestra mano (literal). Cuida lo que entra a tu mente, la sobre-saturación de información tampoco es saludable, sé selectiva, tu mente es algo que debes tratar con cuidado.
27. No tengas miedo de aceptar tus “errores”. Para empezar quizá solo tú los ves como errores, además aceptarlos te quita una carga de encima enorme. A mis 32 acepté y conté que tenía TDAH y no sabes lo relajante que ha sido el poder decir, si, mi mente funciona “raro”, todas las mentes funcionan diferente y lo importante es, hacerlas andar, sacar lo mejor de ellas, de nuestros “errores” que al final todos tenemos y creeme, para nadie son tan importantes.
28. Escríbe. Consejo de escritora, escribe, escribe, escribe. No necesitas ni una sola técnica, como te decía al inicio es una manera de congelar lo que piensas pero también de sacarlo, es una terapia liberadora, te lo recomiendo.. todas en NES, te lo recomendamos. 😉
29. Rodéate de amistades que te sumen. Presiento que nadie que lea esta lista tendrá menos de 15 años, así que ya nos hemos dado cuenta que las amistades son una parte importante de nuestra vida. Una mánera fácil de saberlo es preguntandote cómo te sientes después de ver a tus amigas, si te sientes llena de vida, positiva y mejor, has elegido bien.
30. Perdona tu pasado. Las cosas que no hiciste cuando podías, pesan. Las decisiones equivocadas que pudiste tomar, también pesan, pero no hay nada que puedas hacer al respecto más que perdonarte por ello. Hoy puedes decidir disfrutar tu vida y sacar el mayor provecho posible.
31. Llévatela suave. Trata de manejar un poco más despacio, de decir no cuando no estas lista para algo, de darte permiso de faltar a algún compromiso al que no querías asisitir.
32. Ama y déjate amar. Perdón por el súper cliché, pero hay tanta gente temiéndole al amor. Solo ama, ama y da lo mejor de ti, si alguien te ama, no lo arruines, el amor sana.
33. Agradece. Cambia el chip de cualquier situación, por medio de la gratitud. Cambia tu energía y tu ánimo en cualquier momento por medio de la gratitud, cambia tu manera de ver la vida por medio de la gratitud.