Por Liliana Mendoza
SEGUNDA PARTE
¿Qué te parecieron las recomendaciones de la primera parte?
Continuemos con éstas:
3) Inculcar la idea de poner límites y a la vez respetar los de los demás: La idea de no significa no puede empezar con un juego, lo he comentado en otros artículos, si te gusta hacerle cosquillas pero llega un momento que el te dice que no, significa que el juego terminó. Algunos autores recomiendan hacer algunas pausas cuando jugamos con ellos para checar si están bien o están cómodos. Obligar a nuestros hijos a besar o abrazar a familiares o amigos es probablemente la prueba mas común de cómo ignoramos los límites de nuestros hijos.
Es importante saber escucharlos si queremos que crean en verdad que no significa no, no importa en que aprietos te pueda meter socialmente. Puedes ofrecer alternativas positivas como aventar un beso mientras tu lo tomas de la mano, o solo decir adiós.
4) Cultiva su empatía natural: La empatía es una habilidad (que como cualquier habilidad se puede desarrollar) que aprecia como tus acciones pueden afectar a otros y las puedes ajustar de acuerdo con eso. Los niños por naturaleza son empáticos, reaccionan ante las emociones de las otras personas. Como mamá puedes promover la empatía ayudando a tus hijos a reconocer la emoción que sienten, ponerle un nombre y preguntar que consideren o se imaginen como un amigo o su hermano se sentiría en una situación similar.
5) Trata de eliminar estereotipos: Por favor dejemos de decirle a nuestros hijos, actúa como una dama o decir espera que te sirva yo o tu hermana, o los hombres son machos y fuertes entre otras barbaridades. Es de suma importancia ir eliminando los roles, nuestro propósito es criar hijos seguros y felices. Dejar que los niños lloren, rían y se enojen, son seres humanos que no son ni menos ni mas emotivos que las mujeres.
Nuestra tarea con los niños es día a día, con subidas y bajadas pero siempre creando un ambiente amoroso y de confianza con ellos.
Nuestros niños no serán feministas (porque no puede haber hombres feministas desde mi criterio) pero si puede sentirse orgulloso de que su madre lo sea y haga lo que le corresponda desde su trinchera.