Por Dona Wiseman Una mujer recibió a otra en su casa. La visita pasó a la cocina, miró a su alrededor y notó trastes sucios en el fregadero. Declaró, “Yo nunca tengo trastes sucios en mi cocina.” La anfitriona, al contar la anécdota se encoge de hombros y dice, “Yo ya publiqué dos libros.” Total,…