Por Elena Hernández Creo que fue antier, la última vez que me perdí. Que sentí un vacío, como si se apagara la luz, dejé de visualizar el camino, había niebla delante de mí, sentí frío, incertidumbre, me invadió un sentimiento de angustia y de miedo, comenzaron mis manos a sudar, casi no podía respirar, sentí…